La diferencia entre verdad pura y distorsión disfrazada de guía.
¿Qué es un canal limpio?
Un canal limpio es una conexión espiritual que no pasa por filtros mentales, heridas emocionales ni intereses personales. Es una transmisión directa, sin manipulación, sin agenda oculta y sin interferencia externa.
Quien canaliza desde un canal limpio:
-
No necesita controlar ni convencer.
-
No “traduce” la información para que suene bonita.
-
No se confunde con su ego, su necesidad de aprobación o sus emociones no resueltas.
-
No proyecta su historia personal en lo que entrega.
Un canal limpio sostiene la verdad, incluso si incomoda. Protege lo sagrado. Y, sobre todo, respeta el libre albedrío del otro.
¿Qué es un canal contaminado?
Un canal contaminado es una conexión interferida, distorsionada o usada con fines personales. Puede tener apariencia “espiritual”, pero está infiltrado por:
-
Interferencia psíquica (entidades, pensamientos densos, larvas energéticas)
-
Heridas del ego (reconocimiento, necesidad de poder, salvador)
-
Deseos inconscientes de manipular, castigar, atraer o retener personas
-
Información alterada para generar miedo, dependencia o admiración
Este tipo de canal puede estar “activo”, pero no es confiable. Mezcla verdad con distorsión. A veces “acierta”, pero daña.
Señales de canal contaminado en acción
-
Cambia su mensaje dependiendo de quién lo escucha
-
Usa frases confusas para parecer profundo
-
Justifica sus errores como “parte del mensaje”
-
Empieza a cobrar más por “mensajes más poderosos”
-
Usa su canal para intervenir en relaciones, dinero o decisiones de otros
-
Si lo confrontas, dice que estás “cerrado” o “bloqueado”
¿Cómo se contamina un canal?
-
Por falta de higiene energética después de cada entrega
-
Por querer demostrar poder o exactitud
-
Por recibir energía o información sin pedir permiso ni protegerse
-
Por abrirse a planos que no puede sostener
-
Por exponerse a otras personas o guías sin discernimiento
-
Por no tener un propósito claro y sagrado al canalizar
¿Cómo se limpia un canal?
-
Cerrando completamente el canal al uso cotidiano o superficial
-
Haciendo limpieza profunda de todo lo recibido, entregado o absorbido
-
Cortando lazos con quienes han usado tu canal para beneficio propio
-
Decretando que solo la verdad divina y pura entre a tu espacio
-
Usando protocolos de cierre, blindaje y restauración
¿Por qué este tema es importante?
Porque muchos “mensajes canalizados” no vienen de la Fuente. Vienen de capas intermedias que imitan, distorsionan o incluso copian tu propia frecuencia.
Porque detrás de un “mensaje bonito” puede esconderse un anzuelo energético.
Y porque el verdadero canal no es un don para impresionar, es un camino sagrado que se honra con humildad, disciplina y fuego interno.